Llegó el verano al Reino Unido y con él decenas de festivales musicales como el de 'Glastonbury', que se han convertido en motores del turismo y aportan más de 4.700 millones de dólares a la economía.
'Glastonbury', donde revolcarse en el barro es tan importante como escuchar música, se realizó durante el miércoles y el domingo en el suroeste de Inglaterra, con un cartel integrado, entre otros, por The Who, Kanye West, Pharrell Williams, Lionel Ritchie y Patti Smith.
Unas 135.000 personas asistieron a los cinco días de este festival, uno de los más importantes del mundo, que se celebra desde 1970 en la granja de Worthy, en el condado de Somerset (suroeste de Inglaterra). Glastonbury, segundo festival más caro del mundo El suroeste de Inglaterra, donde está la granja de Worthy, en el condado de Somerset, tuvo en 2014 unos ingresos de 467 millones de dólares, un tercio de ellos por el famoso festival de 'Glastonbury'.
El coste total estimado de la aventura (unos 890 dólares) hace del Festival el segundo más alto detrás del de Roskilde en Dinamarca. Otro paraíso europeo de los festivales musicales es España, con citas como el Primavera Sound y el Sonar, en Barcelona, o el Festival Internacional de Benicássim (FIB), en la provincia de Castellón (este), que atraen cada uno a más de 100.000 personas, muchas de ellas extranjeras.
El Dalai Lama, la estrella del festival de rock en Glastonbury El líder espiritual tibetano, Dalai Lama, participó este domingo en el festival de rock británico de 'Glastonbury' y transmitió su mensaje pacifista. El objetivo de la visita "es la promoción del mensaje de compasión, no violencia y unidad humana de su santidad el Dalai Lama", explicaron los organizadores de su viaje.